En todas las épocas, el cobre se ha utilizado como material de cobertura para los tejado: la mezquita de Santa Sofia en Istambul, la catedral de Hildesheim de Alemania, la bolsa de Copenhague, muchos castillos de Suecia... ¿Y ello a qué es debido?
Su utilización ha sido gracias a que el cobre es un metal con unas características muy favorables:
-LONGEVIDAD: resistente a la corrosión
-ESTÉTICA: metal que envejece bien, que normalmente gusta su aspecto a lo largo de los años
-ESCASA DILATACIÓN: buen comportamiento con las variaciones de temperatura
-FACILIDAD DE INSTALACIÓN: metal muy maleable
-MANTENIMIENTO INEXISTENTE: el cobre desafía al tiempo y a las agresiones atmosféricas
-ECONÓMICO: sin pensar en la inversión inicial, el cobre es un material rentable por su larga duración a lo largo de siglos y siglos
-RECICLABLE: no generamos residuos ya que es 100% reciclable sin perder nunca sus cualidades.
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